Abogados estadounidenses especializados en reclamaciones medioambientales
La liberación de sustancias químicas tóxicas o contaminantes como consecuencia de accidentes industriales o de la negligencia de una empresa puede tener graves repercusiones en la calidad de vida de una comunidad y en su economía. Los efectos de estos peligros medioambientales pueden durar muchas generaciones y afectar a la calidad del aire, el suelo y el agua. Una demanda colectiva suele ser el mejor medio disponible para buscar justicia para familias, particulares y empresas perjudicados por daños medioambientales. Si se encuentra en una situación similar, considere ponerse en contacto hoy mismo con nuestros abogados especializados en reclamaciones medioambientales.
Desgraciadamente, no hay que buscar demasiado para encontrar un ejemplo de daño medioambiental derivado de un accidente industrial. Uno de los ejemplos más recientes es el vertido de petróleo de BP. Este vertido se produjo cuando la plataforma de perforación Deep Water Horizon explotó el 20 de abril de 2010 en el Golfo de México. Se calcula que entre 17 y 39 millones de barriles de crudo se vertieron al agua, lo que convierte a este vertido en el mayor del mundo. El impacto de este vertido en el medio ambiente ha sido considerable. La fauna que vive en el Golfo de México y sus alrededores ha sido devastada, con casi 10.000 animales muertos hasta octubre de 2010. Muchas personas que viven en los alrededores del Golfo de México han informado de enfermedades debidas a los efectos de la inhalación del humo de la combustión del crudo y la inhalación de los vapores del petróleo que llegó a la costa. El considerable impacto económico quedó ilustrado en un informe facilitado al Senado de Estados Unidos pocos días después de que se contuviera el vertido, en el que se calculaba que se habían perdido entre 8.000 y 12.000 puestos de trabajo, al menos temporalmente, debido a este desastre medioambiental. Varias partes han interpuesto demandas colectivas para resarcirse de los daños sufridos como consecuencia de este desastre medioambiental.
Otro accidente industrial con un impacto ambiental sustancialmente grande ocurrió cuando un pozo de gas operado por Chesapeake Energy hizo erupción en abril de 2011 enviando miles de galones de agua tratada químicamente a un afluente cercano cuando el sistema de contención se desbordó. Este pozo de gas se extrajo mediante un proceso llamado fracking. El fracking, abreviatura de fracturación hidráulica, es un proceso utilizado para extraer gas natural de depósitos de esquisto situados en las profundidades de la corteza terrestre. El proceso de extracción requiere la creación de fracturas hidráulicas artificiales en el esquisto. A continuación, se introduce agua a alta presión tratada con productos químicos en el suelo, lo que hace que el gas natural suba por el pozo para ser recogido.
Una de las principales preocupaciones del proceso de fracturación es la mezcla y el tipo de productos químicos que se utilizan para tratar el agua. Aunque muchas empresas mineras afirman que el fluido utilizado en la fracturación hidráulica es agua en un 90%, los grupos de protección del medio ambiente temen que algunas sustancias químicas utilizadas en el proceso puedan ser cancerígenas o estar relacionadas con defectos de nacimiento en casos de exposición prolongada. Tras el accidente de Chesapeake Energy, las autoridades se apresuraron a detener el desbordamiento del pozo que, según sus cálculos, liberó miles de litros de agua contaminada a un suministro de agua local. Como medida de precaución, se adoptaron medidas de emergencia para impedir que los ganaderos de las inmediaciones permitieran el acceso de su ganado a las aguas subterráneas. Los efectos globales de esta catástrofe aún están por determinar.
Nuestros abogados de Indianápolis demanda colectiva ambiental tienen la habilidad y los recursos para litigar las acciones de clase ambientales, y tenemos una reputación de pie por los derechos de los residentes de los barrios que sufren de contaminación ambiental o productos químicos tóxicos. Por ejemplo, Cohen & Malad, LLP tramitó con éxito una reclamación medioambiental contra la mayor planta de reciclaje de magnesio del mundo, que dio lugar a la rehabilitación medioambiental de la zona contaminada y a pagos en efectivo a los residentes cercanos.
Póngase en contacto con nosotros en el 317-636-6481 o cuéntenos su problema a través de nuestro formulario de contacto aquí en esta página y hable con uno de nuestros abogados de demandas colectivas sobre un problema medioambiental al que se enfrente.